Los bomberos del servicio de emergencias del 112 CANTABRIA tuvieron un día y una noche navideña de ajetreo
ya que registraron un centenar de salidas en poco menos de 24 horas. El
balance, setenta incendios forestales repartidos por la región.
Prácticamente todas las actuaciones se debieron al viento
Sur, que en la jornada del 24 de diciembre sopló fuerte en Cantabria.
El registro más alto fue en Tresviso, con rachas de hasta 108 kilómetros
por hora, seguido de Los Tojos, con 97; y Reinosa, hasta 87.
El incendio forestal más importante fue el declarado la tarde del domingo en Socabarga (Villaescusa), que quedó controlado después de 24 horas. Así y todo un retén quedó vigilante hasta la mañana del martes.
El incendio forestal más importante fue el declarado la tarde del domingo en Socabarga (Villaescusa), que quedó controlado después de 24 horas. Así y todo un retén quedó vigilante hasta la mañana del martes.
De los 70 incendios forestales que se registraron a lo
largo del día 24, los que más riesgo tuvieron fueron los que se
produjeron cerca de viviendas, como el de Las Fraguas (Arenas de Iguña),
o el de un arbolado próximo a las casas de El Barrio (Vega de Liébana), en los que intervinieron los Paruqes Nº 6 y Nº 4 respectivamente.
Los efectivos del Parque Nº 5 tuvieron que sofocar un fuego en la carretera autonómica
262, en La Braguía (Vega de Pas), que obligó a cortar el tráfico durante
un tiempo, así como en la carretera autonómica 817,
en Correpoco (Los Tojos), y en otro incendio forestal puso
también en peligro varias viviendas en La Cavada (Riotuerto).
El resto de los focos se sucedieron en al menos 30
localidades de la zona central de Cantabria, donde tuvieron que actuar efectivos de los Parques Nº 6 y Nº 2, así como tres cuadrillas de montes con tres autobombas
forestales y 13 guardas rurales. El servicio de bomberos del 112 CANTABRIA dio por
controlados todos los incendios ayer a la una de la tarde.
